Presidente de la eurozona y ministro de finanzas holandés Dijsselbloem sufre una derrota demoledora en su saga griega
Comunicado de prensa de EPSU
Bruselas 30 junio 2014 - la privatización de las compañías del agua en Atenas y Tesalónica ha sido congelada. Así era la noticia anunciada hoy en la asamblea general de la compañía del agua de Tesalónica (EYATH). Los representantes de los trabajadores aclamaron la declaración de que la privatización en curso de la compañía pública va en contra de una decisión tomada por el Consejo del Estado que había decretado que la privatización de la compañía del agua de Atenas, promovida por el gobierno griego y apoyada por el presidente de la eurozona y ministro de finanzas holandés, Dijsselbloem, era ilegal. Los trabajadores, su sindicato, y una amplia coalición de movimientos sociales organizaron un exitoso referéndum, el 18 mayo de este año, donde el 98% de las 218.000 personas que votaron dijo no a la privatización.
Una declaración hecha por la agencia privatizadora HRADF (también llamada Taiped) anunció que cualquier decisión futura de HRADF debería respetar la constitución griega y la voluntad popular. Suez y Mekorot (los posibles compradores) todavía no han presentado ninguna oferta. Esto demuestra la situación legal inestable y la falta de ganas de involucrarse en una lucha prolongada local con los sindicatos, movimientos sociales y políticos, todos aquellos que apoyaron el referéndum.
Alegrándose de la noticia como una victoria para los trabajadores y los ciudadanos, Jan Willem Goudriaan, secretario general de EPSU, declaró: “La autoridad privatizadora griega y las compañías están reconociendo la voluntad del pueblo de Tesalónica. Ahora el gobierno tiene que garantizar que EYATH queda en manos de los ciudadanos y rechazar ideas viejas como la privatización que es un concepto fracasado que no responde a las aspiraciones populares y que ya no es adecuado para los tiempos que corren.” Agregó: “Es también una derrota demoledora para el presidente de la eurozona Djisselbloem y la estrategia de la Troika de imponer duras medidas de austeridad. Está completamente claro que la Troika no hace nada para fomentar el crecimiento, el empleo y el desarrollo de las economías de los países involucrados.”
“Hasta el actual director ejecutivo de la compañía del agua de Tesalónica admite que ‘esta vacilación constante en la privatización no ha ayudado para nada a la compañía en su tentativa de forjarse una estrategia de desarrollo,’ por lo tanto ya es hora de declarar el agua un derecho humano y de implementar las exigencias del pueblo al nivel local,” añadió Jan Willem Goudriaan.
EPSU, la Federación sindical europea de servicios públicos, organizó la delegación internacional de observadores que estuvo presente durante el referéndum del 18 mayo. Hace tiempo que EPSU argumenta, conjuntamente con el sindicato griego y los movimientos sociales y del agua, que la privatización no resolvería los problemas de la sociedad griega y que hace falta otro enfoque, centrado en estimular el crecimiento y la inversión.
Para más información: Pablo Sánchez Centellas, psanchez@epsu.org, 0032 (0) 474 62 66 33