Somos muchos y muchas los que día a día sufrimos el impacto despiadado de la privatización de los servicios públicos de agua. En Catalunya visión mercantilista y monopolista del agua es absoluta, prácticamente todos los municipios tienen el servicio de agua privatizado a la misma empresa, AGBAR, filial de la multinacional francesa SUEZ. El rechazo y los impactos de SUEZ en todo el mundo es bien conocido por todos ustedes, destacando la finalización de contratos en Buenos Aires (Argentina), Córdoba (Argentina), La Paz y El Alto (Bolivia), Atlanta (EUA), París (Francia), etc. o las fuertes oposiciones en El Saltillo (México), Johannesburg (Sudáfrica), Jakarta (Indonesia) o Manila (Filipinas), entre muchos otras ciudades.

La sesión del Consejo Nacional del Agua celebrada el día 13 de diciembre tiene entre sus puntos del orden del día la aprobación de los planes hidrológicos de demarcación del Guadiana, Guadalquivir, Cantábrico Oriental y Cantábrico Occidental. Los planes hidrológicos que ahora se están aprobando sustituyen a los que todavía están en vigor desde 1998 y deberían incluir medidas que frenaran el deterioro de los ecosistemas hídricos que padecemos. Ecologistas en Acción rechaza la aprobación de dichos planes porque no se contemplan medidas eficaces para frenar el deterioro ambiental y, es más, en algunos casos van a redundar en una mayor explotación de los ríos y acuíferos.

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